30 de noviembre del 2023, departamento de La Paz. En el marco del convenio «Manos que Alimentan», se llevó a cabo un significativo encuentro entre mujeres productoras y lideresas de diferentes municipios de la Paz, con el objetivo de generar un espacio de reflexión, diálogo y análisis sobre las desigualdades de género frente a la seguridad alimentaria y nutricional en El Salvador.
La coordinadora del convenio Manos que Alimentan, Clara Lizarde, destacó la importancia de este encuentro para mujeres que, a pesar de participar en el mismo convenio, muchas veces no se conocen debido a la dispersión territorial. Este espacio permitió intercambiar experiencias, identificar brechas de género que afectan la seguridad alimentaria y construir estrategias conjuntas para abordar estas desigualdades.
El convenio «Manos que Alimentan» tiene como objetivo abordar la problemática de la inseguridad alimentaria en El Salvador, centrándose inicialmente en el sector pesquero artesanal. Sin embargo, el enfoque de seguridad alimentaria se extiende a otras poblaciones, reconociendo la necesidad de una dieta sana y equilibrada. En este contexto, el encuentro se convierte en una plataforma para las mujeres rurales y productoras, abordando sus limitantes y contribuciones a la seguridad alimentaria.
Gloria Cerón, coordinadora del área de Género y Desarrollo Territorial de ORMUSA, resaltó la relevancia de poner al centro la vida de las mujeres y sus voces, compartiendo experiencias y proponiendo soluciones. Gloria hizo énfasis en la importancia de estas reuniones para visibilizar las necesidades y propuestas de las mujeres, asegurando que sus demandas se reflejen en las políticas públicas.
Gloria menciona que, alrededor de 100 mujeres con perfiles diversos participaron en el intercambio, representando a diferentes sectores como pescadoras, emprendedoras, productoras agrícolas y artesanas. El lema del encuentro, «Nosotras proponemos, exigimos e incidimos sobre nuestros derechos», refleja el compromiso de estas mujeres en la defensa de sus derechos y la promoción de la igualdad de género.
Iliana Verali Reyes, de Olocuilta y parte de la Asociación Amuviz, destacó la necesidad de estos encuentros para complementar conocimientos y estrategias, proponiendo que se realicen al menos dos o tres veces al año. “Este intercambio de experiencias es importante porque al final vemos que tenemos, tal vez, las mismas necesidades solo que la situación para poder solventarlas es muy diferente pero con las experiencias de todas podemos ir contribuyendo a mejorar nuestra situación. Estos encuentros deben realizarse al menos dos veces al año”.
Por su parte Sonia Guadalupe Mendoza, del municipio de Santiago Nonualco: “Me ha parecido muy interesante porque se ha hablado de los proyectos de alimentación, y también me ha parecido muy importante porque así cada una de nosotras, y más bien yo en lo personal, me voy dando cuenta de cómo estamos en nuestro municipio y a nivel nacional y con estos encuentros nos damos cuenta que unidas vamos a vencer los obstáculos de cada una de nosotras, con mayor fuerza defendiendo cada uno de nuestros territorios.
Asimismo, Reina Guadalupe Gálvez, de San Antonio Masahuat, destacó la importancia y positividad de su experiencia en las jornadas, resaltando el aprendizaje, el intercambio de opiniones y la necesidad de seguir luchando por los derechos de las mujeres. Subrayó la relevancia de estas iniciativas para erradicar la violencia de género y abogó por la frecuente realización de más encuentros para involucrar a más mujeres en la lucha. “Estas jornadas también nos ayudan a ir erradicando la violencia contra las mujeres porque nos despiertan la mentalidad para decir, sí, ahí tenemos violencia y hay que defendernos todas juntas”.
Rosario de María Alfaro, de Olocuilta, resaltó la importancia de conocer las necesidades de otras mujeres y contribuir al tema de la seguridad alimentaria, proponiendo cultivar alimentos para emprender y tener alimentos en los hogares. “Estos encuentros son importantes porque aportan al tema de la seguridad alimentaria que es bien importante por la razón de que bastante mujeres en todo el país, no cuentan con un empleo fijo y viven mucha necesidad alimentaria y con lo que aprendemos podemos cultivar nuestros propios alimentos más sanos tanto para vender como para nuestras familias”.
Mirna Yanira Cubillas, de San Pedro Masahuat, compartió que el encuentro fue enriquecedor para aprender de las experiencias de otras compañeras y para apoyarse mutuamente en la lucha por sus derechos. “Estos espacios son importantes para intercambiar experiencias para aprender y tener conocimiento para ayudar a otras mujeres y se deberían de realizar más encuentros como este”.
Este encuentro de mujeres productoras y lideresas ha sido un paso significativo en la construcción de estrategias conjuntas para abordar las desigualdades de género en el ámbito de la seguridad alimentaria, contribuyendo al desarrollo económico y social de El Salvador.