ORMUSA y el Área de Trabajo Social de la Coordinación Nacional de Equipos Multidisciplinarios de la Corte Suprema de Justicia (CSJ) realizaron el proceso de formación especializada para la intervención del Trabajo Social desde el Derecho Antidiscriminatorio y la perspectiva diferencial por motivos de sexo.
Este proceso que, se desarrollará en dos jornadas de ocho horas cada una, busca fortalecer las capacidades técnicas para la respuesta institucional de la CSJ, respecto a la comprensión del abordaje de la violencia y discriminación contra las mujeres desde una perspectiva de derechos humanos y basada en estándares internacionales de protección a partir de la formación y el establecimiento de protocolos y rutas de atención remota y su difusión.
Estas jornadas están dirigidas a personal de Trabajo Social que labora en la Jurisdicción de Derecho a una vida libre de violencia y discriminación para las mujeres, de Familia, Especializada de la Niñez y Adolescencia, así como en los equipos multidisciplinario del Centro de Atención Psicosocial del Órgano Judicial y se realizan en el marco del Convenio de Cooperación entre ORMUSA y la CSJ.
El licenciado Manuel Armando Funes, jefe del Departamento de Coordinación del Equipo Multidisciplinario de la CSJ, planteó la importancia de una capacitación constante que permita atender y brindar un buen servicio. Los aportes del Trabajo social son indispensables en la toma de decisión que realizan las juezas y jueces, por tanto, es necesario estas capacitaciones en la mejor toma de decisiones, conclusiones y recomendaciones en los peritajes.
Para Silvia Juárez, coordinadora del programa Por una vida libre de violencia para las mujeres de ORMUSA, detalló que, estos procesos tienen como objetivo principal garantizar que la ciudadanía cuente con personas profesionales, no solo del respaldo de titulación, sino de capacitaciones para la creación de nuevos análisis basados en la evidencia científica. Las personas que realizan Trabajo Social son los ojos de las juezas y jueces en los procesos, por lo tanto, es necesario que brinden una observación distinta, sin estereotipos y prejuicios sobre diversos temas, de esa manera se brindará respuesta y resolución conforme a la justicia.
La licenciada Aracely Linares jefa de la Coordinación Nacional de Trabajo Social indicó que se deben visibilizar las prácticas del trabajo social, trabajo técnico y altamente ético, para garantizar el ejercicio de los derechos de las personas en vulnerabilidad.
La jornada fue presidida por el licenciado Manuel Armando Funes, jefe del Departamento de Coordinación de Equipo Multidisciplinario de la CSJ; licenciada Aracely Linares, jefa de coordinación nacional de Trabajo Social, Silvia Juárez, coordinadora del programa Por una vida libre de violencia para las mujeres de ORMUSA y Keyry Bustamante, facilitadora.
Esta formación se desarrolla por medio del Acuerdo de convenio entre ORMUSA y la organización internacional Christian Aid y el auspicio de la Agencia de Cooperación Irlandesa para el Desarrollo- Irish Aid, en el marco del proyecto “Fortaleciendo sistemas locales y nacionales de prevención y atención de la violencia contra las mujeres”. Así también en el convenio con la Asociación Internacional de Solidaridad y Cooperación -SUDS y el auspicio de la Agencia Catalana de Cooperación para el Desarrollo y Ayuntamiento de Cataluña (ACCD) para la ejecución del proyecto: “Red Anawanti – Fortaleciendo organizaciones feministas de Mesoamérica y sus alianzas para avanzar en la erradicación de las violencias contra las mujeres” que, especialmente espera financiar acciones de la línea sobre fortalecimiento al área de trabajo social del Órgano Judicial, y de igual forma apoyó el Fondo Global de Derechos Humanos.