San Salvador, 9 de diciembre de 2019. Silvia Juarez, coordinadora del Programa hacia una vida libre de violencia para las mujeres de la Organización de Mujeres Salvadoreñas por la Paz (ORMUSA), participó como panelista en el Foro «Acceso a justicia para las mujeres en El Salvador: una mirada a la violencia sexual en el país» realizado en el marco de los 16 días de activismo.
El objetivo del foro fue sumar voces y hacer un llamado a la acción a continuar trabajando en erradicar la violencia contra la mujer.
La ministra consejera de la Embajada de Estados Unidos en El Salvador, Julie de Torres expresó que continuarán acompañando esfuerzos por dar voz y atención a las víctimas, pero que, se necesita un esfuerzo de la sociedad para hacer cambios importantes en el país. Asimismo, hizo un llamado a trabajar desde la casa, las escuelas, desde el gobierno a brindar más recursos y a generar políticas públicas que apoyen los esfuerzos para que las víctimas puedan acceder a la justicia; a los jueces que emitan sentencias justas y a los medios de comunicación que contribuyan a generar información que concientice sobre el problema.
El foro estuvo conformado por cuatro panelistas: Marina de Ortega de la Fiscalía General de la República, Jeannette Tobar de la Procuraduría General de la República, Silvia Juarez de ORMUSA, Benjamín Bonilla de Más Paz y fue facilitado por Eva Rodríguez del Proyecto Derechos y Dignidad.
Silvia Juarez de ORMUSA en su intervención describió la cultura de la violación la cual no es analizada desde el hecho mismo como tal, sino de todo lo que hay a su alrededor y que lo determina. Por tanto, hay que develar esta cultura en la que hay toda una sincronía de mecanismos que van determinando la violación como una prerrogativa masculina.
Juarez, fue enfática en destacar que solo 6 de cada 100 mujeres pedían auxilio o presentaban denuncia. Pero el dato que debe llamar la atención es que, en 94 hechos, el sistema fue incapaz de detectar la violencia.
También, Juarez cuestionó sobre la evolución de las resoluciones y el uso de la frase “delitos de alcoba” como la denominación sobre victimización por medios sexuales. Con relación a esta denominación, Silvia planteó que se hizo un estudio para analizar las resoluciones sobre violencia sexual contra las mujeres emitidas entre 1781 y 1910 en El Salvador y al compararlas con las actuales son exactamente iguales. Esto conlleva a la interrogante: ¿Cómo es posible que el servicio más costoso del país (Órgano de Justicia) tenga, en pleno Siglo XXI, las respuestas más obsoletas frente a la violencia sexual?
Es por ello por lo que Juarez plantea que se debe de iniciar una reforma profunda a la legislación, construir evidencia alrededor de todos los parámetros discriminadores que todavía subsisten en las resoluciones, en la construcción de la investigación y, también, implementar un abordaje desde la interseccionalidad, es decir, reconocer la posición que ocupan las personas a partir de la victimización e identificar esos ejes de agresión, para generar política pública que cuestione ese trastorno de la identidad masculina llamada machismo que determina esas prácticas contra las mujeres. Finalmente, Juarez aclaró que “atacamos a un sistema de valores instalado e inscrito en todos lados, no es contra los hombres”.
Posterior a la intervención de cada panelista se abrió el espacio para la participación de la audiencia con testimonios impactantes. Sobrevivientes de secuestros, violencia sexual, violencia por pandillas, fueron algunas de las situaciones expuestas.